Una nueva llamada a revisión se ha hecho oficial, en este caso se ven involucradas unidades de la marca Dodge y Jeep, las cuales se han comercializado en el mercado de Estados Unidos.
Se ha señalado que esta acción preventiva contempla un total de 184.214 unidades de las marcas ya mencionadas, de los modelos Durango 2014 y Jeep Grand Cherokee 2014, por lo que tendrán que acudir a su distribución para realizar la revisión correspondiente y solucionar el problema.
Chrysler comentó que el problema que pueden presentar estas unidades está en un módulo defectuoso de control de retención de ocupantes, un componente electrónico que gestiona la implementación del sistema de retención y que podría presentar un corto circuito en estos modelos.
La marca aseguró que hasta este momento no se han registrado accidentes o personas lesionadas a causa de este problema, por lo que inicia la acción preventiva para evitar poner en riesgo a los usuarios.
En caso de que este fallo se haga presente podrían activarse las luces de advertencia de las bolsas de aire, lo que nos indica que se detecta un problema relacionado con las bolsas de aire o en los pretensores de los cinturones de seguridad, por lo que en un posible choque puede haber lesiones mayores para los tripulantes.
Chrysler contactará a los propietarios de las unidades involucradas en esta acción preventiva para que acudan a su distribuidor y poder realizar la revisión y en caso de ser necesario, remplazar el módulo defectuoso.
Así que si adquirió un Jeep Gran Cherokee o Dodge Durango 2014 acuda a su concesionario para obtener mayor información.
